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Testimonios

“Llegué al Reiki en un momento difícil de mi vida, enfrentando un cáncer. Durante mi tratamiento con quimioterapia, Hande me brindó sesiones de Reiki con frecuencia, lo cual no solo me ayudó a aliviar algunos efectos secundarios, sino que también me aportó una paz interna y una comprensión profunda de lo que estaba viviendo. Este proceso hizo que mi sanación fuera más completa, tanto en el cuerpo como en el espíritu. Mis ojos brillaban con una luz dulce, un amor que nunca antes había sentido.

Al acercarme al final de mi tratamiento, decidí iniciarme en Reiki. Fue un paso significativo para reconectar conmigo misma y seguir creciendo tanto personal como espiritualmente. Ahora, Reiki forma parte de mi vida cotidiana y me ayuda a mantener mi bienestar físico y a guiarme en mis propósitos.

Reiki ha cambiado muchos aspectos de mi vida. Si estás leyendo esto, te animo a que escuches tu intuición y descubras el papel que Reiki podría tener en tu vida. Agradezco profundamente al Reiki y a Hande por la luz que han traído a mi camino.”

Ana Esteban Alonso

Ana Esteban Alonso

“Mi primer contacto con el Reiki fue en el curso de Hande en noviembre de 2010. El curso se realizó durante un fin de semana, sábado y domingo, y cubrió el primer y segundo nivel de Reiki.

Para mí, fue una experiencia inolvidable y marcó el inicio de una vida diferente en la que comencé a incorporar mis nuevos conocimientos en mi día a día.

Es maravilloso poder ofrecer Reiki a las personas cercanas y a uno mismo; además, es muy gratificante y una herramienta poderosa para enfrentar dolores físicos y emocionales, ayudándonos a comprendernos en otro nivel.

Mi experiencia durante ese fin de semana marcó un antes y un después, algo que recomiendo a tod@s.”

Mar Martos Granados

Mar Martos Granados

“¿Qué puedo decir de Hande que no expresen sus ojos? Esos ojos que transmiten sin hablar toda su energía y paz, dándote una sensación de armonía. Descubrí el Reiki hace 12 años, pero solo hice el primer nivel en ese momento. Fue en el verano de 2010 cuando algo en mi vida me llevó de nuevo a encontrarme con Reiki, y fue entonces cuando conocí a Hande. Desde entonces, ha sido un camino lleno de cosas buenas. Reiki me ayuda a detenerme y valorar lo positivo que dejamos de ver en el camino por el ritmo loco de la vida cotidiana.

A quienes no lo hayan probado, les aconsejo que lo hagan; encontrarán algo en su interior que quizá no sabían que estaba allí. Gracias, Hande, por estar en mi camino. Un beso enorme.”

Maria Angels Martinez Torrente

Maria Angels Martinez Torrente

“¡Hola! Llegué a Hande y al Reiki con muchas preguntas, buscando respuestas, y ya en nuestra primera entrevista obtuve algunas. Las demás llegaron cuando Hande me inició. Es algo difícil de explicar si no lo has experimentado. Encontré paz en mi interior, lo cual me ayudó a tener más claridad, fuerza, y salud mental, física y espiritual. Reiki es maravilloso, y Hande es un ser de luz que transmite el poder del Reiki con una fuerza infinita.

Amo Reiki y el estado de felicidad en el que estoy. Me ha ayudado a aceptarme como soy, a perdonarme, y a sanar todo lo que necesitaba ser sanado. Sigo en el camino de la luz y el amor con Hande y todos los seres de luz que encuentro gracias al Reiki. No puedo expresar en palabras todo lo que Reiki y Hande significan para mí. Solo puedo dar gracias por haberlos encontrado. ¡Gracias, gracias, gracias! Un abrazo de luz para tod@s… Namasté.”

Maria Navarro

Maria Navarro

“Reiki es energía, es vida, es amor, es conexión con uno mismo… ¡Es tantas cosas a la vez! Me inicié hace dos años con la intención de entenderme mejor a mí misma y mi entorno, sin saber realmente lo que significaría en mi vida. Me habían dicho que marcaría un antes y un después, y necesitaba cambios sin saber cómo lograrlos. Tras iniciarme, experimenté cambios radicales que se instalaron progresivamente en mi vida: ya nada es igual, y yo no soy la misma.

He aprendido a conocerme, respetarme, valorarme y también a hacer lo mismo con los demás. Todo ha cambiado, y cada día mi vida se parece más a lo que deseo y necesito aprender. Justo este mes me inicié en el tercer nivel, y puedo prever muchos cambios más, principalmente una mayor conciencia, luz, paz interior y amor. Hande es un ángel que apareció en mi vida en el momento justo, y le estoy muy agradecida; es una persona llena de amor y dulzura, una luz que espero conservar a mi lado siempre.”

Puri Arévalo Lazaro

Puri Arévalo Lazaro

“Mis expectativas eran altas y se cumplieron. La experiencia fue (y sigue siendo) altamente positiva. Me queda mucho por aprender, y contar con Hande es fundamental para mí.”

Guadalupe Blanco Barroso

“Para mí, Reiki es la conexión entre la conciencia y la energía divina del universo y la tierra. Esta hermosa experiencia diaria me proporciona paz, serenidad, amor, alegría, optimismo y perdón, entre otros estados. Siento mi vida más ligera, porque mi energía fluye en armonía y lo que me rodea se manifiesta positivamente.

Recuerdo cómo me interesé en Reiki: una mañana de domingo, mientras tomaba café en casa con mis hijas, sentí una voz muy sutil en mi interior que me decía: escribe ‘Reiki’ en el ordenador. En segundos, apareció un nombre hermoso y original: Hande. Desde entonces, he tenido una alegría profunda, porque encontré la respuesta a lo que había estado buscando: cómo equilibrar mi interior y ayudar a otros a sentir este bienestar.

Después, me comuniqué con Hande para tomar los cursos de Reiki. Estoy muy agradecida a mi ángel de la guarda por guiarme hacia Hande y a Hande por su sencillez, cariño, humildad y amistad. ¡Namasté!”

Linda Beach

Linda Beach

“Mi experiencia con Reiki ha sido maravillosa. Asistí al curso de verano de 2010, y lo hice porque en mi familia había una persona gravemente enferma, y quería estar a su lado con toda la energía positiva posible. Y así fue; el curso me dio todas las herramientas para estar con ella y ayudar en su recuperación. Desde entonces, Reiki me ha ayudado en mi día a día para afrontar tiempos de grandes decisiones y cambios.

Ha sido y sigue siendo una gran experiencia que comparto con quienes me rodean y conmigo misma. Gracias, Hande, por todo. ¡Desde Colombia, un gran abrazo y felicitaciones por seguir adelante!”

Catalina Castilla

1. ¿Qué ha representado el Reiki para mí?
Conocí el Reiki en un momento difícil, cuando mi esposa estaba en el hospital, y me sugirieron que recibiera sesiones de Reiki. Voluntarios, a quienes agradezco su dedicación, la ayudaron cada día, y en especial, recuerdo a una joven bajita que irradiaba algo especial. Pude notar que mi esposa también sentía vibraciones positivas más intensas, lo cual le daba una mayor sensación de bienestar. A partir de ese momento, le pedí si podía enseñarme, y ella aceptó. Hasta hoy, he completado el nivel de Maestría en Reiki con mi maestra Hande.

2. ¿Qué consigo con el Reiki?
Primero que todo, paz interior y equilibrio.

3. ¿Para qué me sirve en mi vida?
Aparte de mi propio bienestar, intento ayudar a quienes encuentro en mi camino y desean recibirlo.

4. ¿He ayudado a alguien?
Sí, a mí mismo, a mi esposa, y a otras personas que he encontrado.

5. ¿A quiénes he podido ayudar y cómo?
He ayudado a una pareja que estaba bajo mucho estrés intentando tener un hijo. Colaboré con ellos mediante Reiki, y poco después lograron su sueño. También he apoyado a un amigo con depresiones periódicas, y una amiga que atravesaba una ruptura. Intento reflejar paz en mi entorno de trabajo, aunque a veces no es fácil.

6. ¿Siempre es así?
No siempre consigo esa paz interior, pero Reiki me ayuda.

7. ¿Qué ha representado mi maestra para mí?
Como ella dice con frecuencia, las cosas no ocurren por casualidad... y al final, tendré que creerlo. Así fue como el destino nos cruzó, y para mí ha sido muy gratificante encontrar a una persona tan espiritual, dulce y llena de buenas intenciones, que posee 'algo muy especial'. La verdad es que extraño asistir a las reuniones mensuales que organiza, porque de algún modo me ayudan a recargar esa voluntad de seguir en este buen camino, ya que no siempre resulta fácil mantener la constancia en las prácticas de Reiki por distintas razones."

Joaquin Vargas

Joaquin Vargas

“Me acerqué al curso de Reiki con ilusión, queriendo experimentar una apertura de energía y vivir algo nuevo. Para mí, fue fantástico. No vi luces ni seres; soy absolutamente atea, pero me abrí a la energía, a mi emocionalidad, y a conectarme con el todo. Cuando hago la autosanación, me emociona la conexión y siento que todo está bien, que estoy en el momento presente. Es una sensación maravillosa.”

Dolors Garcia Vivero

Dolors Garcia Vivero

"Reiki es una práctica o un hábito que considero que todos deberíamos integrar en nuestras vidas. Proporciona energía y confianza. Llegué a la consulta de Hande en un momento en el que me sentía abatida por varias situaciones que me habían afectado, y no sabía cómo recuperarme. Lo único que tenía claro era que no quería recurrir a medicamentos que pudieran dañarme aún más. Había leído sobre esta terapia y decidí probar con Hande. Desde la primera llamada, sentí una buena energía, y mi primera sesión fue tranquila y suave. No experimenté esos destellos de luz o sensaciones fuertes de los que algunos hablan, pero sin duda, me sentí mejor.

A lo largo de las siguientes sesiones, experimenté distintas sensaciones, y puedo decir que realmente me siento bien. Reiki es algo que se experimenta, difícil de describir en términos técnicos, y creo que el terapeuta es una pieza clave. Confío plenamente en Hande; es profesional y sabe lo que hace. Gracias, Hande, por tu ayuda... Ha sido y sigue siendo un placer."

Nuria Blanco Arenas

Nuria Blanco Arenas

"Empecé a practicar Reiki por recomendación de una amiga, ya que sufría frecuentes dolores de espalda debido a una desviación que me provocaba contracturas constantes. Mi amiga, que es fisioterapeuta, se cansó de darme masajes y me sugirió probar con Reiki, pensando que podría ser más efectivo para mí. Buscando en internet, encontré a Hande y descubrí su curso, que me pareció una opción más barata para tratarme, ya que suelo hacer las cosas por mi cuenta. Así comenzó mi experiencia con Reiki, y hoy puedo decir que ha transformado mi vida. No solo ya no tengo contracturas, sino que también mi vida es menos estresante; ahora me siento más fuerte, decidida en mis acciones y segura de mí misma.

Supongo que mis dolores de espalda y cabeza se debían al estrés y la presión de alcanzar metas, pero ahora veo las cosas desde una perspectiva más tranquila. Avanzo a un ritmo pausado, segura y disfrutando del presente; el tiempo ya no me obsesiona, mi cuerpo está en calma y mi mente descansa. Recientemente he pasado por grandes cambios en mi vida personal, y me encuentro en una etapa donde necesito soledad y crecimiento personal y espiritual. Siento que el Reiki ha sido un gran apoyo en este sentido y seguirá siéndolo.

Hasta ahora, no me había atrevido a hacer Reiki a otras personas; tal vez no estaba segura de los resultados o de mi capacidad. Sin embargo, ahora lo recomiendo a todos; quiero que el bienestar que siento alcance a tantas personas como sea posible. En vacaciones, comencé a practicarlo con mi madre y mi hermana, y al terminar, me sentí tan relajada como cuando lo hago a mí misma. Creo que eso demuestra que estoy lista para compartir con los demás lo que el Reiki me ha aportado, aunque todavía necesito mucha práctica."

Patricil Esteban

“Hace un año que estoy iniciado en Reiki, y ojalá lo hubiera hecho antes, porque me ha ayudado a ver y entender cosas que antes no podía comprender. Además, me ha servido para ayudarme a mí mismo y a los demás.”

Ivan Ferrer López

Ivan Ferrer López

“Para mí, el curso de Reiki ha sido muy gratificante a nivel personal. Solo he hecho la iniciación del primer nivel, pero ya con ello, se te abre un mundo nuevo, porque la práctica del Reiki permite, poco a poco, abrir los chakras. Estoy muy contenta y deseando pasar al segundo nivel.”

Merce Domenech Ferret

Merce Domenech Ferret

"Empecé a practicar Reiki por recomendación de una amiga, ya que sufría frecuentes dolores de espalda debido a una desviación que me provocaba contracturas constantes. Mi amiga, que es fisioterapeuta, se cansó de darme masajes y me sugirió probar con Reiki, pensando que podría ser más efectivo para mí. Buscando en internet, encontré a Hande y descubrí su curso, que me pareció una opción más barata para tratarme, ya que suelo hacer las cosas por mi cuenta. Así comenzó mi experiencia con Reiki, y hoy puedo decir que ha transformado mi vida. No solo ya no tengo contracturas, sino que también mi vida es menos estresante; ahora me siento más fuerte, decidida en mis acciones y segura de mí misma.

Supongo que mis dolores de espalda y cabeza se debían al estrés y la presión de alcanzar metas, pero ahora veo las cosas desde una perspectiva más tranquila. Avanzo a un ritmo pausado, segura y disfrutando del presente; el tiempo ya no me obsesiona, mi cuerpo está en calma y mi mente descansa. Recientemente he pasado por grandes cambios en mi vida personal, y me encuentro en una etapa donde necesito soledad y crecimiento personal y espiritual. Siento que el Reiki ha sido un gran apoyo en este sentido y seguirá siéndolo.

Hasta ahora, no me había atrevido a hacer Reiki a otras personas; tal vez no estaba segura de los resultados o de mi capacidad. Sin embargo, ahora lo recomiendo a todos; quiero que el bienestar que siento alcance a tantas personas como sea posible. En vacaciones, comencé a practicarlo con mi madre y mi hermana, y al terminar, me sentí tan relajada como cuando lo hago a mí misma. Creo que eso demuestra que estoy lista para compartir con los demás lo que el Reiki me ha aportado, aunque todavía necesito mucha práctica."

Dolores Carrasco

"Primero quiero agradecer a Hande por darnos la oportunidad de expresar nuestras experiencias, tanto en las iniciaciones como en nuestra vida personal, y así dejar testimonio del potencial de esta terapia en todos los niveles.

Mis sensaciones durante las iniciaciones de nivel fueron variadas, aumentando en intensidad sensorial, emocional y espiritual. La primera vez, la sensación fue mínima, quizá por ser mi primer contacto; sin embargo, en el segundo nivel, las sensaciones cambiaron. Sentí la energía recorriendo mi aura y llenando mi cuerpo con una luz suave, una luz que nunca había percibido hasta ese momento.

Meses después, habiendo practicado lo que Hande me enseñó, sentí que algo me faltaba en mis canalizaciones y envíos de energía. Decidí hablar con ella sobre esta sensación, y tras una conversación profunda, acordamos que recibiría el tercer nivel para crecer tanto energética como personalmente y así llenar el vacío que percibía.

Debo decir que fue un avance notable en todos los sentidos. Desde el inicio de la tercera iniciación, las sensaciones fueron aumentando durante toda la sesión, como si mi cuerpo espiritual se estuviera preparando para el momento final de la canalización. Las sensaciones que experimenté en este tercer nivel fueron mucho más intensas que en los niveles anteriores; sentía el movimiento energético en cada rincón de mi ser. Incluso llegué a experimentar un momento de plenitud emocional, donde se mezclaban emociones de alegría y tristeza en una turbulencia que al principio era difícil de controlar, pero que poco a poco se fue calmando hasta alcanzar una paz interior que es indescriptible si no se vive.

Después de recibir este tercer nivel, puedo decir que ese vacío que sentía comenzó a llenarse poco a poco a medida que lo ponía en práctica. Con cada día, aprendo más y comprendo mejor aquello que antes no entendía. Esto no significa que todos necesiten los tres niveles; conozco terapeutas que, con el primer nivel, sienten una satisfacción tan plena que no requieren más.

El Reiki es una terapia que, al practicarla, compartirla o estudiarla, llena ese vacío que muchas veces sentimos sin saber por qué. Al mirar atrás después de una iniciación, es posible ver cómo ese vacío deja de serlo, convirtiéndose en un espacio de esencia pura donde fluyen emociones y pensamientos, de los cuales puedes extraer sabiduría si los escuchas, analizas y los pones en práctica."

Jaime Jordán

Jaime Jordán

"Describir cómo la energía Reiki se ha manifestado en mi vida es algo que va mucho más allá de lo que puedo expresar en palabras. Llegué a ella cuando estaba preparada, tras algo tan simple como leer un libro que había estado meses en mi mesa de noche. Empezaba a leerlo cada noche, pero nunca pasaba de las primeras páginas. Un buen día, tras finalmente terminar esa lectura, sentí una gran alegría, como si algo nuevo se abriera ante mí, y una sed inmensa de llenarme de esta energía que en ese momento solo percibía. A partir de ahí, todo comenzó a encajar hasta llegar a mi conexión actual con el Reiki.

Esto mismo fue lo que le comenté a Hande en nuestra primera entrevista antes de comenzar los cursos de reiki. Desde entonces han pasado más de dos años y cuatro niveles, hasta alcanzar la maestría. En estos años, he aprendido a vivir de una manera diferente a la que estaba acostumbrada; las cosas que me suceden, las situaciones que enfrento, ya no son cargas ni problemas. Ahora, las vivo con confianza y tranquilidad, convencida de que encontrarán solución, y doy gracias cada día por los resultados.

Creo firmemente que, tras iniciarme en la energía Reiki, mi vida cambió. Se abrieron muchas puertas que antes no podía ver. Ahora comprendo cada situación en la que me veo envuelta, ya sea directa o indirectamente, y el motivo de mi presencia en ellas.

Hace un año, le comenté a Hande que, desde que estaba en comunión con la energía Reiki, había conocido a personas que enfrentaban situaciones muy similares a las mías, y me alegraba poder ayudarlas a superarlas, acompañarlas y comprenderlas. Comprender a las personas que están a mi lado, ya sea de manera permanente o solo en momentos puntuales, es algo que siempre agradezco. Poder reaccionar con calma ante sus experiencias y verlas desde una nueva perspectiva, desde el amor, hace que cada momento con ellas sea único. Aunque es cierto que aún hay situaciones que me afectan, la energía de calma y serenidad siempre regresa, y con ella, puedo ver el camino y los resultados que vendrán.

Como mencioné al inicio, la energía Reiki llegó a mi vida en el momento adecuado. Después de mi iniciación en el primer y segundo nivel, atravesé experiencias muy fuertes en el ámbito personal, tanto por lo que significaban como por las personas involucradas. Quizás las hubiera superado de otra manera, pero con la energía Reiki y el apoyo de Hande y todos aquellos que me enviaron energía, siempre mantuve la confianza en que los resultados serían positivos. Reiki me lo confirmó, y así supe que todo tiene un motivo.

Cada vez más siento la comunión de la energía Reiki en cada situación que enfrento; siento cómo me da respuestas y me llena de paz, serenidad y amor. Sé con claridad que cada día hay un largo camino por recorrer y nuevas oportunidades para descubrir lo maravilloso de la vida. Por eso, cada día estoy más dispuesta a caminarlo, convencida de que todo es para mejor. Me sorprendo a menudo observando escenas que antes me pasaban desapercibidas y sonriendo con alegría ante ellas. Como dije antes, el Reiki me ha cambiado y estoy feliz de que haya sido así.

Hace algunos meses, alguien me preguntó:
¿De verdad crees en el amor?
Mi respuesta fue inmediata, brotó desde mi interior, y le contesté:
Creo firmemente en el amor. Me duermo convencida de haberlo vivido y me despierto segura de que me acompañará siempre.

Al decir esto, me sentí inmensamente agradecida de poder expresar este amor tan profundo por todo y por todos, con total libertad y convicción. Por estas y muchas otras razones, estoy eternamente agradecida de estar en comunión con la energía Reiki, agradecida con Hande y con cada uno de vosotros, por poder decir siempre desde el corazón en mi autosanación:
‘Soy la que se despierta feliz y se duerme agradecida cada día’.

GRACIAS."

Paula Muñoz

Paula Muñoz

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